El gran esfuerzo por aparentar
Home » Desarrollo  »  El gran esfuerzo por aparentar
El gran esfuerzo por aparentar
Esa energía que gastamos en mantener una imagen de perfección, la podemos utilizar para mostrarnos cada vez más auténticas...

"Me doy cuenta que hace mucho tiempo decidí ponerme la careta de "yo hago todo bien" y hoy esta careta pesa muchísimo. Requiere de mi un gran esfuerzo cada día y termino muy cansada. Además, si no consigo hacer algo bien y con ese nivel de exigencia altísimo, me critico, me juzgo, me regaño muy fuerte y me siento pésimo conmigo misma, "como es posible que me haya equivocado?" me repito muchas veces. Incluso esa careta me limita de hacer otras cosas que deseo, porque el miedo que surge es "imagínate si me equivoco! imagínate si no sale bien! que dirán de mi, etc.""

Lo anterior es un extracto de uno de mis diarios personales de hace unos años donde relataba algo muy doloroso que iba descubriendo en mi . Escribir así es algo que hago desde adolescente y que sigo haciendo hasta el día de hoy. Es un gusto natural en mi que, además de ser placentero, ha sido una herramienta terapéutica poderosísima para conocerme e ir sanando heridas emocionales.

Te cuento que esto de hacer todo bien o aparentar que siempre estoy bien y casi casi que soy inmune a errores, fallos y humanidad, es un traje o careta que decidí ponerme inconscientemente cuando era muy pequeña porque pensaba que así me iban a querer y aceptar y además hacerlo, me protegería del dolor. Esto lo descubrí hace ya muchos años a base de intenso trabajo personal donde entendí como es que funciona en todos los seres humanos este mecanismo de búsqueda de amor y como es que haremos lo que sea para conseguirlo. En ese aprendizaje también confirmé que la principal figura ante quien buscamos ser amados es nuestra madre.

En mi caso, la orden de ser casi perfecta era de mi abuela materna con su severidad enorme (parte de su personaje) y como mi madre obviamente miraba a su propia madre también en busca de amor, yo busque ser como la abuela pedia porque ingenuamente creía que si me ponía en ese lugar donde mi abuela me aceptaba y aplaudía, directamente y sin escalas mi madre lograría verme y me amaría. Se entiende esto? Este enredo lo descubrí a base de muchos años de terapia principalmente con la Biografía Humana y las Constelaciones Familiares y es un ejemplo de una vida (la mía) que pone en evidencia el como usamos personajes y ocupamos lugares que no nos corresponden con tal de ser amadas y miradas.

Esto de buscar ser amadas y ponernos una careta o personaje lo hacemos instintivamente cuando somos pequeñas y nos damos cuenta de que nuestra madre o la persona que nos cuida, por algún motivo, no nos ama tal y como somos. Y por que nuestra madre no nos amaría tal y como somos si es nuestro derecho de nacimiento? Porque mama estaba muy lastimada también ya que su propia madre tampoco pudo amarla tal y como era... y la abuela tampoco vivió el amor incondicional de su propia madre... y así ocurrió hacia atrás en una cadena transgeneracional muy dolorosa de desamor y desamparo.

Ser amadas es nuestro derecho de nacimiento e incluso sabemos que un bebe podría morir si no recibe lo suficiente de amor y cuidados. Entonces, si andamos por aquí en el mundo mas o menos llevando una vida donde tenemos comida, techo, una que otra relación, etc., es porque alguien nos cuido en infancia aunque sea con lo mínimo requerido, y gracias a ello logramos sobrevivir y llegar hasta hoy. El principal tema que necesitamos abordar es ese ESPACIO (mas chico o mas grande, depende de cada historia) que quedo entre lo que yo necesitaba de amor y cuidados por parte de nuestra madre VERSUS lo que recibí realmente. Esto se puede abordar de una manera preciosa con la Biografía Humana : )

Ese ESPACIO es lo que hoy, también inconscientemente, se nos presenta en forma de problemas como: baja autoestima, adicciones, problemas en nuestros vínculos o relaciones, depresiones, etc. De alguna manera esa niña interior dentro nuestro aun sigue reclamando lo que le hizo falta de amor y cuidados y es ese problema que nos aqueja hoy un llamado a MIRARNOS profundamente y tal vez por primera vez en nuestra vida. Mama pudo darnos lo que nos dio, hoy nosotras que somos adultas tenemos la oportunidad de sanar y dejar de repetir ese dolor transgeneracional para ya no transmitirlo a los que siguen después de nosotras o al menos, disminuir su impacto poniendo mas consciencia en nuestro actuar y nuestras decisiones para así poder influir de manera mas positiva en quienes nos rodean.

El problema de nuestro personaje o careta se nota mas cuando salimos al mundo mas o menos por adolescencia y empezamos a relacionarnos con otros que también están saliendo de casa al mundo y nos damos cuenta de lo difícil que nos resultan los vínculos ya sea porque sentimos que no encajamos o no nos sentimos aceptadas de algún modo. Duele y entonces lustramos nuestro personaje, como diría Laura Gutman, nos esforzamos y utilizamos esas habilidades que aprendimos de niñas con mayor ahínco en nuestras relaciones y dependiendo de que tipo de personaje hayamos construido, nos ayuda mas o menos, nos es mas o menos util.

Entonces, lo que aprendimos a hacer de niñas (personaje o careta) es algo que hoy seguimos haciendo en nuestras relaciones. Lo que aprendimos a hacer en casa (nuestro escenario de infancia) es lo que hoy seguimos viviendo en nuestras vidas. Aprendimos a hacer eso para protegernos y para buscar amor. Si hoy en nuestras relaciones hay dolor, si nosotras mismas nos sentimos mal con quienes somos por algún motivo, tal vez sea el momento de mirar dentro nuestro y preguntarnos, DE DONDE VIENE ESTO? QUE PUEDO HACER PARA TRANSFORMARLO? o a veces simplemente pensamos que queremos una vida distinta, que tal vez haya OTRAS MANERAS DE VIVIR CON MAS ARMONIA...

Nuestros personajes o caretas nos ayudaron a llegar hasta hoy y aunque cubren nuestra verdadera esencia, tambien están llenos de habilidades que vamos a seguir utilizando.

Hoy personalmente sigo trabajando con mi careta y personaje : ) lo lindo es que puedo verme conscientemente en acción mas seguido y puedo darme la oportunidad de parar cuando detecto que eso que siento o estoy haciendo no soy yo en esencia, son mis creencias de infancia, mis miedos y temores, mis heridas (que es igual al personaje o careta)... y al hacerlo mas consciente, puedo decidir actuar distinto... esperar un poco... abrazarme y cuidarme... cuidar también a los demás...

Muchas veces tampoco me sale... y me voy directita a aparentar, a buscar ser perfecta y aparentar que en mi vida todo va bien y sin problemas... cuando logro mirarme allí, también me abrazo... soy humana... no soy perfecta y nunca lo sere y esta bien ser asi... soy suficiente así como soy... me abrazo y busco apapacharme también allí...

Te mando un abrazo muy fuerte y hasta muy pronto!

Adriana Solis

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *